3. El conflicto

3.2. Alternativas colectivas para la gestión y transformación de conflictos

Se habla de "prevención de los conflictos" para aludir a la necesidad de actuar antes de que exploten (crisis) y se manifiesten en su forma más descarnada. Este término, sin embargo, en castellano, tiene connotaciones negativas: no hacer frente al conflicto, evitarlo, no analizarlo, no dejar que aflore todo lo que hay dentro, no ir a sus causas profundas, etc.

Si el conflicto es consustancial a las interacciones humanas, ineludible e incluso positivo como una oportunidad para crecer, no parece adecuado hablar de “prevención” de conflictos.

Paco Cascón sugiere mantener el término de “prevención” cuando nos referimos a la guerra, a los conflictos bélicos, o a cualquier otro tipo de consecuencias destructivas. Hablaremos de “provención” (J. Burton) como el proceso de intervención antes de la crisis que nos lleve a:

  • Una explicación adecuada del conflicto, incluyendo su dimensión humana.
  • Un conocimiento de los cambios estructurales necesarios para eliminar sus causas.
  • Una promoción de condiciones que creen un clima adecuado y favorezcan unas relaciones cooperativas que disminuyan el riesgo de nuevos estallidos, aprendiendo a tratar y solucionar las contradicciones antes de que lleguen a convertirse en antagonismos.

En este sentido, la provención a nivel educativo va a significar intervenir en el conflicto cuando está en sus primeros estadios, sin esperar a que llegue la fase de crisis. Se trata de favorecer y proveer de una serie de habilidades y estrategias que nos permitan enfrentar mejor los conflictos. Se trata en definitiva de poner en marcha un proceso que cree las bases para enfrentar cualquier disputa o divergencia en el momento en que se produzca.

Se trata de un proceso, porque el desarrollo de cada una de estas habilidades está apoyado en la anterior y porque es fundamental que se trabajen de una forma planificada y sistemática si queremos que tengan efectividad.

Algunos autores comparan la provención con el ahorro. Si hemos ido introduciendo periódicamente pequeñas cantidades en nuestra cuenta de ahorro, será posible disponer de un capital extra para afrontar un gasto inesperado. La provención es como una forma de ingreso periódico y constante, que nos permite actuar antes de la crisis. Supone desarrollar una serie de habilidades y estrategias para afrontar adecuadamente los conflictos, habilidades que van escalonándose y apoyándose unas a otras, con distintas exigencias para las personas formadoras y para el alumnado.

En la figura [1] siguiente podemos ver en la escalera de la izquierda los temas a trabajar con el alumnado y en la de la derecha las implicaciones que tiene para el profesorado.

Imagen sobre cómo educar en y para el conflicto.

Imagen 5. CASCÓN, P. (2001) Educar en y para el conflicto. Disponible en: http://bibliotecavirtualrs.com/2012/11/educar-en-y-para-el-conflicto/


  • Las habilidades a trabajar serían las siguientes:

  1. Crear grupo en un ambiente de aprecio y confianza.
  2. Favorecer la comunicación.
  3. Toma de decisiones por consenso.
  4. Trabajar la cooperación.

[1] CASCÓN, P. (2001) Educar en y para el conflicto. Disponible en: http://bibliotecavirtualrs.com/2012/11/educar-en-y-para-el-conflicto/